El nombre del sitio web, Dancing Bear, es lo más engañoso posible. No hay bailes de osos reales, solo una stripper con cabeza de osito de peluche yendo de mesa en mesa en el club o fiestas privadas follándose a todas las damas a su paso. Estas perras han perdido todas las inhibiciones con solo un sorbo de alcohol y ahora sus coños anhelan algunos huesos grandes.